Una vez enroscado se nos queda apuntando hacia la pared, lo que no es muy conveniente.
Por eso no la apretamos a fondo. Ahora podemos apretar un poco más para que apunte hacia abajo.
El siguiente paso es volver a abrir las llaves de entrada, tanto la superior como la inferior y purgar la instalación.
Para ello es conveniente hacerse con varios cacharros: uno o dos pequeños, para ir recogiendo cerca el agua que saldrá y uno grande para ir vertiendo