Cabecero mesita 13

Una vez rematadas las juntas y seca la pasta se procede a una primera lijada completa del mueble. Ya lo habremos ido lijando a trozos y reajustando en las zonas donde aplicamos la pasta. Pero para esa función habremos usado lija gruesa (80) y aquí realizáremos una lijada para uniformizar y abrir el poro con lija media (120) y otra con lija fina (240) para suavizar.

 Tras el lijado aplicaremos una primera capa de selladora o imprimación para madera y la dejaremos secar bien.

Cabecero con función de mesita

Una vez seca la volveremos a lijar con lija fina y aplicaremos una primera mano de pintura rebajada un 10%. Aplicaremos hasta tres manos, lijando entre ellas, de pintura base (esmalte) antes de dar una última mano con pintura de esmalte laca. Aunque el proceso de pintado inicial hemos usado rodillo para la última mano con la pintura de esmalte laca lo hacemos a pincel, ya que no dispongo de pistola que sería lo ideal.

Hay que distinguir que las pinturas de esmalte y esmalte laca son distintas y que si se va a usar pistola, para el lacado, es conveniente que sea de compresor y no de impulsión. Dado que estas son más caras y realmente yo no laco mucho opte por hacerlo a pincel. En ese caso es muy importante dar una sola pasada y todas las pinceladas en la misma dirección.

La última parte de esta fase consiste en llevarlo al sitio y antes de la ubicación definitiva tapar los agujeros, más que nada con el objetivo de evitar que por ellos pueda entrar algún bicho en la estantería o refugiarse en el hueco entre el mueble y la pared. Una vez puestas las tapas se puede sujetar con un clavo pequeño, quedando, además, fácil de soltar por si hay que moverlo.

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