¿La ruptura del PSOE romperá España?

¿La ruptura del PSOE romperá España?

Es cierto que España se ha roto más de una vez en guerra civil antes de la existencia del PSOE. En realidad desde que los territorios que forman España tienen constancia histórica podemos decir que hemos estado más tiempo en guerra entre nosotros que en cualquier otra situación: Desde las guerras de las tribus iberas y celtas entre sí y un pueblo contra el otro, la participación de estas en los distintos bandos de las guerras púnicas (Roma y Cartago) y la posterior participación en los bandos de las guerras civiles del final de la republica romana.

Las múltiples guerras civiles de los pueblos godos que ocuparon la península tras la dominación romana (no solo las guerras entre suevos, vándalos y alanos, sino en especial las acaecidas con la instauración del reino visigodo de la que es la más conocida la rebelión de  Hermenegildo contra su padre Leovigildo pero si bien esta pudo ser la más llamativa es bien conocido que la lista de gobernantes godos es tan larga entre otras cosas porque se sucedían unos a otros tras la correspondiente derrota militar. Y no olvidemos la traición de parte de los visigodos a Don Rodrigo, el último rey, que dicho sea de paso había accedido al trono violentamente dio lugar a una invasión musulmana, más bereber que árabe, en realidad, que tampoco culminó en la unidad. Por parte musulmana, tras la invasión acabaron independizándose en el Emirato de Córdoba que posteriormente daría lugar al conocido Califato de Córdoba… pero pese a la fama este periodo apenas barca unos doscientos años del total (unos cien para el emirato y otros cien para el califato) tras lo cual acabaron divididos en múltiples reinos conocidos como taifas que aunque en ocasiones colaboraban en otras se enfrentaban entre sí. Y qué decir de los reinos cristianos: Los primeros enfrentamientos entre Asturias, León y Galicia, en realidad entre los hijos del rey asturiano en varias y sucesivas particiones o entre los hermanos, dando lugar a reunificaciones, en el oeste mientras los condes y duques de la marca hispánica se enfrentaban entre sí tanto como con los árabes. Y cuando las coronas crecieron las guerras civiles siguieron: Castilla contra León y León contra Castilla o los nobles contra el Rey o en apoyo de uno u otro rey en las diferentes crisis dinásticas. Y lo mismo podemos decir de Aragón, donde más de una ocasión el reino quedó sin sucesión, o de los nobles, en especial los catalanes, contra el rey ya entonces en búsqueda de menor control de este. Y tras la unión la situación tampoco ha sido siempre pacifica: Comuneros en Castilla y Germanías en Valencia y Baleares, se levantaron contra Carlos I cuando aún no era emperador y siguieron en sus primeros años como Carlos V. La guerra de sucesión de Carlos II, que finalmente llevaría al trono a Felipe V, las guerras carlistas, a la muerte de Fernando VII y hasta los primero años de Alfonso XII, la rebelión cantonal durante la primera república, la sublevación revolucionaria de 1934 y la guerra civil de 1936.

El egocentrismo de la política de España

De todas estas las dos últimas son significativas porque las divisiones internas del PSOE le llevaron a estar en los dos bandos o casi: mientras en 1934 una gran parte del PSOE (y no solo ellos) se rebelaban contra la republica rechazando la tricolor y exigiendo la bandera roja de la Unión Soviética, ora parte pretendía contemporizar; Y tras la sublevación mientras una parte optaba por la revolución y la unión con los comunistas otra intentó, sin éxito, pactar con los sublevados para conseguir la paz.

Las dos últimas veces que el partido socialista se partió España se partió ¿Volverá a pasar?

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