Hoy primer día del quinto mes completo que vamos a estar con un gobierno en funciones, previsiblemente puesto que si mañana no hay presidente electo las Cortes se disolverán y se convocarán nuevas elecciones, previsiblemente para el 26 de Junio.
Y para estas elecciones, como para las anteriores, el presidente en funciones ha decidido jugar la carta del miedo: mientras una parte del partido del gobierno nos amenaza, muy fundadamente por lo que sé de mis amigos venezolanos, con una debacle si Pablo Iglesias llegase a ganar las elecciones y ser presidente del gobierno, otra parte se dedica a criticar a Ciudadanos para conjurar sus propios miedos a la sangría de votos que puede representar para el PP la existencia de Ciudadanos, incluso a pesar del fallido pacto con el PSOE. Y aunque es posiblemente mejor para el PP, y para España, aunque quizá no para Rajoy, que los votos que pierde el PP vayan a ciudadanos y no a la abstención, ya que será la única opción de pacto que tenga el PP, pero posiblemente eso le implique sacrificar “su reina”, es decir al propio Rajoy.
Y todo esto porque la carta del miedo, miedo a Podemos y su totalitarismo venezolano-islámico no les ha funcionado. Y podría decir que no les ha funcionado porque lo han hecho tan mal que han cansado a sus bases y a los indiferentes hasta el punto que muchos piensan «con Podemos nos vamos a la mierda, pero nos vamos a la mierda todos, mientras que con el PP “ellos” (los de siempre: políticos, bancos, eléctricas, grandes medios de comunicación,…) no ser irán a la mierda». Pero lo cierto es que no solo pasa eso, sino que han estado tan interesados en tener un enemigo contra el que prevenirnos, con el fin de que temiéndole votemos a Rajoy que se han olvidado de que no debían proteger a ese enemigo, ni a los medios que le apoyan.
Sin embargo, en lugar de eso, vemos como la fiscalía se inhibe ante cualquier noticia de financiación venezolana, iraní o en general extranjera (y por tanto ilegal) de los miembros o la estructura de Podemos. Pero no solo eso sino que sistemáticamente salvan a los grandes medios de comunicación que apoyan a Podemos: PRISA, Cuatro, La Sexta,… siguen hoy día operando y no han cerrado en concurso de acreedores por las diferentes intervenciones del gobierno y en especial de su vicepresidenta.
Así que señores del PP, no nos amenacéis con Podemos mientras lo sigáis protegiendo… porque aun siendo cierto que es letal para España, mientras sigáis protegiéndolos, no os creeremos.
