Dejamos el sábado pasado viendo las diferencias entre empresas constructoras.
¿Cuál es, pues, la diferencia? Determinadas partidas pueden encarecerse mucho en función que las subcontrate con otras empresas, especializadas, o con microempresas o autónomos. Caso muy significativo fue el de la estructura que se podía ir en torno a un 200% de diferencia. Es decir si la estructura se presupuestaba en índice 100 por aquellos que la realizaban «ellos», es decir subcontratando los albañiles (en general los mismos que el resto de la parte de albañilería) por un lado y comprando el hormigón a (ver), los que subcontrataban con una empresa de estructuras se subían al índice 300. Creo recordar que los importen oscilaban entre 40.000 y 150.000 euros, para una casa unifamiliar aislada. La única «prestación» de más que ofertan estas últimas es que suministran los análisis realizados por un laboratorio independiente, en lugar de tener que contratar uno el laboratorio por su cuenta. Pero teniendo en cuenta que, si no recuerdo mal, las facturas del laboratorio fueron cuatro o cinco y el montante no superó los 700 euros en ningún caso, es decir como mucho hablamos de unos 4000 euros… y creo recordar que había alguna, incluso, de menos de 100, lo que dio un montante de control de calidad de los pilares cercano a los 3.000 euros… ¡Lo que no justifica la diferencia de coste!
