Reorganización instalaciones

Con la amoladora grande podemos cortarlo sin romperlo. Eliminamos los trozos que nos impiden posición los ladrillos en el hueco disponible.

Con ello podemos pasar a medir el otro lateral de la arqueta a realizar, marcando dónde hay que recortar los ladrillos.

En este caso, como el recorte no va a ser completo sino solo de una de las dos partes sí podemos usar la amoladora pequeña.


Una vez cortados los podemos poner sobre el terreno y mirar cuanto nos queda para sujetarlo, aunque eso es la teoría como comprobaremos más adelante.

De momento suponemos que le vamos a poner un ladrillo del 4 en horizontal para que la trampilla quede nivelada.