Reorganización instalaciones

Situamos y marcamos los ladrillos buscando que trozos hay que cortar para conseguir que se adapten al hueco y que quepan y a la vez nos sirvan para sostener el marco. Primero los marcamos con lápiz

Luego probamos a cortarlo con la amoladora pequeña, de si bien llega menos es más manejable, sobre todo en casos como aquí que queremos un corte preciso y parcial

Pero aunque cortamos la parte exterior en los ladrillos anchos no es capaz de llegar a cortar la unión interior:


Por lo que finalmente recurrimos a la amoladora grande, la que tiene un plato de 320 mm Ø frente a los 115mm Ø de la pequeña. Naturalmente si no disponemos de una amoladora grande podemos tratar de romper la interior llevando cuidado y tratando de no causar demasiado destrozo.