Reorganización instalaciones

Al final del artículo pasado concluimos la primera fase de la reorganización de las instalaciones de electricidad y fontanería de la piscina, la que imprescindiblemente deberíamos hacer para trasladar las instalaciones de la zona que iba a quedar enterrada a una nueva. Era algo necesariamente rápido por complicado que fuese. Debíamos retirarlas de su ubicación y mantener su función, al menos las principales, de suministro de agua y electricidad a la depuradora y, a la vez, hacerlo lo bastante rápido como para no ralentizar el ritmo de trabajo de los obreros.
Ahora entramos en una nueva fase, una fase en la que vamos a ir recuperando las funcionalidades perdidas, pues la instalación tenía más de las mínimas que hemos mantenido, y disponiéndolas ya en su forma definitiva, pues no pensamos realizar grandes obras en el futuro, al menos grande obras que les vayan a afectar.
La cuestión es que a partir de ese momento ya no tenemos prisas, o al menos las que tenemos van por otros derroteros. El final de la obra no solo significa el inicio de la segunda fase del traslado de instalaciones, sino también el inicio de otras muchas tareas a realizar, entre las que están reorganizar la valla de la piscina para otorgar más espacio a la zona de baño, preparar toda esta para la plantación de césped, preparar los nuevos terrenos para el huerto y… Así que en este momento no hemos acabado aún con la reorganización.
Por ello, esta nieva fase, llegará a un punto en la que empezará a tener otros montajes intermedios, cuando lleguemos a contaros todo lo realizado, y retomaremos conforme vayamos adelantando con este.