Obama no es presidente…

…del partido demócrata, ni secretario general ni ningún otro cargo de poder en el partido. Tampoco lo es Hilary Clinton. Ni lo era su marido Bill, cuando se presento a las primarias presidenciales y las ganó, no sé si lo es ahora. Y lo mismo podemos decir respecto al partido republicano de los Bush (padre e Hijo) o de Ronald Reagan, por poner ejemplos de los últimos presidentes de Estado Unidos… aunque podríamos remontarnos bastante atrás en el tiempo. Quizás no hasta el principio de la joven democracia Estadounidense… pero sí hasta un momento que pocos países de la Europa continental gozaban de democracia.

Lo cierto es que el penoso y bochornoso proceso de primarias que esta viviendo el partido socialista nos hace dudar que se trate de un partido democrático… al menos en este aspecto. El mecanismo de primarias podría ser más democrático que la elección directa de los cargos del partido como cabezas de lista, pero no lo es por como se está realizando. Cuando la elección es entre el líder del partido en un territorio (caso de Tomas Gómez En la Comunidad de Madrid) y otro candidato, un proceso democrático, como es el de unas primaras, se convierte en plebiscitario… es decir en dar un refrendo al poder oficial o enfrentarse a él. Mayor bochorno, para la democracia, es cuando, con primarias o sin ellas (y aquí ningún partido está libre de culpa) los candidatos son impuestos desde los organismos del partido de mayor ámbito territorial, a los ámbitos dependientes de ellos, sea en forma directa de primer miembro de la lista, sea en forma de candidato, oficial o impuesto, en apoyo o a la contra de la dirección de la entidad menor.

Y en este caso a lo que se enfrentan los militantes del partido socialista de la Comunidad de Madrid es sencillamente a un doble plebiscito entre su dirección regional y la dirección federal.

No puedo, nadie salvo los militantes, pueden pedir a un partido que piense como ellos (aunque me temo que en el segundo caso es más bien viceversa: ellos piensan como les pide el partido) pero lo que sí tenemos derecho a solicitar los seres racionales es coherencia. Coherencia que se resume, en el caso de las primarias, únicamente en una de las dos posibilidades:

.- Primarias estilo estadounidense donde los cargos del partido permanecen al margen y los dos candidatos son ajenos a los órganos de dirección del partido.

ó

.- «Primarias» directivas, donde todos los miembros del partido eligen, de forma previa a las elecciones y por votación directa, no en forma de congreso de compromisarios, a los lideres del partido, que serán los candidatos a las elecciones.

Lo demás… como diría un castizo, son pamplinas.

Y por cierto, si tan democráticos quieren ser nuestros partidos ¿por qué no proponen de una vez una reforma electoral, donde todas las listas sean abiertas como al del senado, al menos?

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