Uno de los problemas a la hora de realizar un proyecto de bricolaje es la disponibilidad de sitio, y otro de herramientas.
Si este proyecto tiene que ver con nuestro automóvil, en lugar de con nuestra casa, otra de las complicaciones puede ser la correcta disposición de los restos, teniendo en cuanta que algunos de ellos pueden ser tóxicos.
Por ello me llamó la atención el otro día un reportaje que leí en el diario Levante, lamentablemente sólo en la edición en papel, por lo que no os puedo traer un enlace a él sino el escaneado que podéis ver y sobre el que, si pincháis, accederéis a una imagen en mayor tamaño, sobre un taller donde podemos realizar estas labores.
También podéis acceder a las tarifas y condiciones en la página web de los talleres, aunque probablemente no sean los únicos tienen, desde mi punto local de vista, la ventaja de ser los que están en Valencia.
En cuanto a las pegas… también las hay. Para empezar si eres de los que trabajan sábados, tendrás que planificarte una tarde o una mañana libre, ya que aún siendo amplio su horario es de lunes a sábado. En cierto modo lógico pues hablamos de un taller y no de un local de ocio… aunque podría ser considerado como tal.
La facturación por medias horas, en el alquiler de los boxes, y por periodos de 10 minutos, si precisamos de ayuda profesional es interesante, aunque los precios, que oscilan de 16 a 19 € /hora, según el tipo de Box y si queremos o no elevador, y los 30 €/hora de la ayuda pueden hacer que no nos salga rentable, si nuestro objetivo es abaratar costes con el bricolaje.
Aunque seguro que más de uno aficionado a tunear su coche, en lugar de su casa, probablemente sea capaz de sacarle un gran partido, yo, más habituado a la paleta que a la llave inglesa (aunque esta la use en fontanería) y a los soladores eléctricos de, como mucho, 60 W más que a los potentes soldadores usados en los arreglos de chapa, posiblemente me salga más caro un arreglo de bricolaje que llevar el coche al taller.
