Nos quedamos, por fin, preparando para pintar la primera parte de la valla.
Parte de esa preparación consistió en tapar ajustadamente las partes más delicadas, en especial la cerradura.
También tenemos que proteger la pintura, dado que lo vamos a realizar en lo más caliente del verano, del sol y del calor, para lo que usamos una sombrilla. Y un platico para proteger la mesa sobre la que trabajamos.