Protección del robot de limpieza de la piscina
Una vez realizada la medida del ancho del montaje lo llevamos a las barras de la estructura de la segunda estantería, aunque no nos vale cualquier posición, tenemos que ajustar los cortes lo más posible a los agujeros existentes, porque si no, además de cortarlos, tendremos que perforarlos con el taladro.
Pero claro, hacer coincidir los agujeros con ambos extremos teniendo en cuenta que la distancia es la que nos han dado dos baldas consecutivas era demasiado pedir, aunque realizando un corte más, es decir no yéndonos al extremo existente, lo que sí conseguimos es hacer un único agujero por tira, ya que uno de los existentes lo podemos aprovechar.
Una vez taladrado podemos fijarlo con lo que dará consistencia a la estructura, que hasta ahora estaba únicamente sujeta por la base de las baldas que hemos usado como techo y que no aportan demasiada consistencia al montaje. Para poder fijarlas tenemos que desmontar una a una algunas de las sujeciones de las baldas usadas como laterales para aprovechar el tornillo (y el hueco) en la sujeción de los ángulos que nos van a servir unir ambos laterales de la estructura.
