Mantenemos los dos pequeños trozos de cable dentro mientras calentamos y aplastamos el otro extremo. Eso hará que esa parte mantenga la forma y no la pierda al calentarse de forma residual.
Y lo mismo que hemos hecho con los tubos más finos hacemos ahora con este doblando una de los dos extremos
Abrimos un poco más el hueco y lo montamos, comprobando que puede ir sin problemas