Todos sabemos lo incomodo que es entrar y salir de la bañera, en especial cuando hay algún problema de movilidad o simplemente de espalda.
Pero si difícil es entrar y salir de la bañera, no es más fácil llenar y sacar un pozal de fregar lleno de agua, cuyos diez o quince kilos hay que soportar a plomo para rebasar el borde de la misma. Cierto que hoy muchos disponen de duchas de tipo teléfono que, en ocasiones, pueden usar fuera de la bañera, aunque no siempre es el caso.
Por si es vuestro problema aquí os traigo una solución, cierto es que en las fotos resulta un poco cutre, contribuyen a ello la mala calidad de las mismas, pues las hice con el móvil, pero también el que la idea está aplicada en los baños de un aparcamiento público.
Naturalmente siempre podemos sustituir el trozo de manguera por algo más elegante como el flexo de una ducha que podamos enrollar y guardar detrás del lavabo consiguiendo que quede más discreto. Sobre todo teniendo en cuenta que en casa habitualmente tenemos pie o un mueble bajo el lavabo.
