Reorganización instalaciones

Como podéis observar en la foto en el lateral perpendicular al muro donde hemos atornillado parte del marco cabe un ladrillo del cuatro tumbado, aunque hemos optado por ponerlo cortado para que no sobresalga demasiado, sobre todo en el vacío, mientras que en el lateral paralelo a dicho muro, y más o menos perpendicular a la depuradora de la piscina, no cabía dicho ladrillo, por lo que optamos por poner rasillas, una de ellas cortada a la mitad en su longitud. Donde en vacío entraba un ladrillo del cuatro, ahora con la masa que las une (o las separa, según el punto de vista) nos entran dos rasillas, una encima de otra.

Y ahora llegamos al punto dónde vamos a finalizar este montaje, al menos desde el punto de vista narrativo. La parte superior del anclaje de la trampilla va a ser el propio forjado del suelo que vamos a construir en esta zona, pero que narraremos detalladamente en el próximo montaje de extensión del jardín de la piscina, aquí simplemente nos quedamos con el aprovechamiento de una vieja verja provisional que se dejaron los albañiles para usarla como armazón metálico de nuestro forjado.

El ancho de las tiras es el que nos da la valla, si eliminamos los trozos que hacen un doblez, que si lo usamos nos aumentaría mucho el espesor de la capa a hormigonar, en cuanto a la distancia cortamos que sobre un poco y así nos sirva de cimentación para el escalón y recortamos en ancho algunos puntos para poder poner la parte corta salvando las irregularidades de dicho lateral.