Una vez pasado por los tubos llega el paso más difícil: hay que hacer pasar el cable por el codo que hemos pegado. Para ello debe estar bien seco el pegamento ya que si no se soltaran las piezas.
Para conseguirlo necesitamos pasar primero un alambre. La forma más fácil de hacerlo es desde el interior hacia el exterior.
Una vez en el exterior llega el momento de unir el alambre al cable y usarlo para introducir el cable en la depuradora.
Y una vez pasado el cable hacia el interior llega el momento de cerrar el tubo. Para ello usamos codos desmontables que se abren por la mitad. De esta forma al poner el codo después del cable este giro puede ser mucho más cerrado, ya que no hay que pasar el cable por él.
Y los montamos para terminar la entrada del cable en la instalación.
Y solo queda volver a conectar el cable al motor de la depuradora para volver a ponerla en marcha.
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