Instalar enchufes en el despacho

Preparación de las cajas

Continuamos con la instalación de los mecanismos en el despacho. Para ello decíamos que es necesario hacer llegar los hilos a ambas cajas. Pero mientras en una necesitamos abrir una de las solapas grandes para hacer pasar el tubo con los cables, para pasar de una caja a otra no hace falta. Para es pase nos basta con abrir una de las pequeñas solapas del fondo. Por ahí pasaran los hilos sueltos.

Esta abertura hay que hacerla en ambas cajas. Por la abertura por la que entraran los cables y el tubo no pueden salir para ir a la segunda caja. Como segunda caja vamos a usar una caja flexible. No es que me gusten. De hecho, después de haberlas comprado me arrepiento de ello. Eran más baratas, mucho más baratas. Pero su calidad deja mucho que desear. No es que no duren, posiblemente igual que las otras. Ni que se rompan, de hecho es más fácil dañar irreversiblemente una caja rígida que estas. Os preguntareis, pues, cuál es el problema. Simple y llanamente que ceden cuando las montas. No se sujetan firmemente a la pared y hasta que no tienen el mecanismo dentro no tienen asiento suficiente como para mantenerse en el sitio. Pero las tengo y no las voy a tirar. Tengo que usarlas y lo hago en la posición menos crítica.

Fijando las cajas

La primera que vamos a montar es la más rígida, ya que ella soportara todo el conjunto. Pasamos los cables que la unirán a la otra y el tubo con los cables que nos traerán la electricidad hasta los enchufes. Luego la ponemos en el sitio. Para fijarla hay que apretar los dos tornillos de las solapas. De esta forma que se hace presión entre la caja (por un extremos) y la solapa (por otro) de la placa de yeso. Lo que no hace, aunque supuestamente sí, la caja flexible. Este sistema también funciona en paredes de obra, al menos las de ladrillo hueco, o las provistas de azulejos, por lo que también se pueden usar en esas instalaciones.