Cada vez son más las noticias que anuncian la salida del euro de Grecia, y tras ellos probablemente el resto de los llamados PIGS, incluido España.
Aunque tengo mis dudas de la viabilidad formal del proyecto, pues al menos inicialmente parece que los interesados en la salida del euro no son los países afectados sino Alemania y Francia y si bien existen mecanismos para que un país que lo desee abandone el euro, no existen mecanismos para expulsarlo… al menos no directamente.
Muchos economistas han tratado el tema del empobrecimiento derivado del abandono del euro. A nivel nacional la deuda emitida (al menos en los mercados internacionales) seguirá siendo en euros, por lo que si la nueva moneda nacional tras la salida cae, como es previsible ya que lo primero que debería hacer el gobierno tras la salida es devaluar (¡Y mucho!) para conseguir que el diferencial de precios con el exterior caiga y nuestros productos sean más competitivos para la exportación. Pero esta devaluación conlleva un incremento directo de la deuda, que al estar en euros no sería devaluada. También un incremento de precios, lógico en el caso de las importaciones pero menos en el de los productos nacionales, aunque se puedan ver afectados por los incrementos en combustibles.
Por otra parte es de esperar (y lo contrario sería una de las pocas cosas que justificaría actuaciones violentas) que lo mismo que los salarios y ahorros, los créditos (en especial los hipotecarios) deberían ser cambiados a la nueva moneda, se llame pesetas (de nuevo), pesos, federalitos o zapatitos. Pues quizás lo mejor seria darle un nuevo nombre y empezar con un cambio paritario (1 zapatito = 1 euro, por ejemplo) para, a continuación, dejarla caer en los mercados.
Naturalmente la inflación sería en zapatitos y no en euros, por lo que aquellos que tuvieran el ahorro en bancos, salvo que fueran bancos extranjeros, verían disminuir sus bienes, pero también los que tuvieran hipotecas deberían ver disminuir estas. Cierto que no disminuirá el número: Una hipoteca de 100.000 euros sería una hipoteca de 100.000 zapatitos. Pero con una inflación del 30% anual (motivada por la caída de la moneda respecto al euro entre otras cosas) serian menos los 100.000 zapatitos cuando el salario (si se mantienen como parece querer el gobierno indexado a la inflación) pasé de 1000 a 1300 zapatitos al mes en el año.
Es decir en algunos aspectos una salida del euro y una alta inflación en moneda nacional podría ser beneficiosa para aquellos que tienen hipotecas, siempre y cuando, siguiendo una adecuada lógica las mismas se cambien a la nueva moneda.
Aunque por otra parte también habría que tener en cuenta el aspecto de los intereses.
Naturalmente aquí tenemos varias posibilidades: Hay hipotecas referenciadas al MIBOR, que por ley se ha asimilado al EURIBOR al desaparecer este, e hipotecas referenciadas en la escritura al EURIBOR. La cuestión es ¿Seguirán referenciadas a un EURIBOR estándar o por el contrario, pese a que el EURIBOR no desaparezca se cambiarían al nuevo MIBOR? Pues seguro que si España se separa del Euro se ha de recrear el MIBOR, con el peligroso riesgo de que la banca nacional lo aproveche para subir artificialmente los tipos de interés. Algunas medidas, similares a las ya reclamadas `por algunas asociaciones de consumidores europeas, como las de bloquear los tipos durante un tiempo, cuando se vio que el BCE estaba bajando los tipos pero la banca forzaba a subir al EURIBOR en el 2007/2008 debería ser tomada para paliar este efecto, aunque no creo que se haga.
Si pago lo mismo de hipoteca, o menos en relación a mi salario, no es mala medida salir del euro, aunque el resto de la economía nacional se joda, si voy a acabar pagando más mejor que no… Eso es lo que piensan muchos en realidad y es lo que pensaban muchos en 2006 y 2007 cuando anunciaban el fin de la construcción y la caída de los precios en muchos foros sobre la burbuja inmobiliaria y que acusaban a los demás de alarmistas, o de interesados en la construcción, cuando se les decía que si la construcción y el mercado inmobiliario caía la economía se hundiría.
